Segunda Junta de Gobierno de Quito

La invasión napoleónica a España y la consecuente abdicación del rey Carlos IV en su hijo Fernando VII, quien a su vez abdicó a favor del emperador francés Napoleón I, creó una tensa y caótica situación política que llevó al pueblo a sublevarse formando "juntas", que eran gobiernos locales de carácter popular que aseguraban luchar por España y por el Rey.

Tan pronto arribó, el joven Montúfar decidió convocar una nueva junta.

Esto no fue bien visto por las autoridades españolas y por algunos nobles, que veían como la familia Montúfar alcanzaba un poder cada vez mayor.

En efecto, Guayaquil se había declarado separada de la Audiencia de Quito y el Virreinato de Nueva Granada para ligarse al Virreinato del Perú, por lo que el virrey Abascal le escribió una misiva que rezaba: «(...) desconociéndole como Comisionado del Rey, pues no he recibido ninguna comunicación al respecto.

Manifiesta también que desconoce la arbitraria y abusiva separación que hizo el Virrey de Perú sin disposición especial del Virreinato de Nueva Granada, a cuya jurisdicción pertenecía Guayaquil.

Esta última parte se refiere a la misiva enviada por el virrey Abascal al Ayuntamiento guayaquileño: «(...) se diga a dichos señores que excusen más solicitudes que traigan el mismo aspecto con referencias a esos propios objetos y que se entiendan directamente conmigo, el Virrey».

Nuevamente, las ciudades cercanas le declararon la guerra a Quito y despacharon tropas para someterla.

Crnel. Carlos de Montúfar y Larrea.
Mapa del Estado de Quito (1811-1812).