[1] Diego (Andrés Gómez) debe cumplir con una típica tradición: “pagar el piso”.
La jornada transcurre tranquila hasta que llega la hora de cerrar.
Mientras Yasna (Carolina Oliva), les lleva la cuenta; dos de los hombres deciden seguir comiendo y tomando impulsados por un extraño deseo de venganza contra el dueño del lugar Chang (Pablo Chuying), sólo porque éste es oriental.
Es así como la situación se empieza a poner violenta, acrecentada por el hecho de que el cocinero del recinto (Juan Miranda) es un hombre mapuche, que no se siente integrado como chileno.
Los efectos de la discriminación a los que son sometidos los trabajadores del restaurante, mientras Diego intenta poner paños fríos apelando a la tolerancia y la integración, provocará un desenlace inesperado.