Savva Mámontov

[1]​ Provenía de una familia siberiana de industriales y comerciantes de trenes y petróleo que se mudó a Moscú.

Estudió en las universidades de Moscú y San Petersburgo y en 1862, su padre lo envió a Bakú.

En 1864 visitó Italia, allí tomó clases de canto y le presentaron a Elizabeth Sapazhnikova, hija de un comerciante ruso.

Al fallecer su padre en 1869, Savva heredó su compañía de ferrocarriles, que amplió de Yalutorovsk-Moscú a Donetsk.

El 1870, compró cerca de Moscú la finca Abrámtsevo, que frecuentaron muchos artistas y sería centro neurálgico de la cultura rusa.