Saturnino de Cagliari

San Saturnino de Cagliari (fallecido en 304?)

fue, de acuerdo a la tradición cristiana, un mártir que fue decapitado durante las persecuciones del emperador romano Diocleciano por negarse a realizar sacrificios a Júpiter.

Otra hipótesis pretende hallar su origen en un mártir del norte de África, cuyo culto se habría trasladado a Cerdeña.

Como sea, San Saturnino se cuenta entre los santos más venerados de Cagliari desde épocas remotas.

Su principal templo ha sido históricamente la basílica de San Saturnino, una iglesia paleocristiana cuya edificación se remonta al siglo V.