Se encuentra a medio camino en la ruta de Pyongyang hasta la frontera intercoreana (DMZ).
Anterior a la Guerra de Corea, la ciudad era un punto importante en el comercio en la península, pero desde 1953 ha ido centrándose en su potencial industrial con una relativamente moderna agricultura.
Aunque algunos la consideran una recreación romantizada y no muy exacta de una calle tradicional coreana, es frequentemente conocida por ser un destino turístico para extranjeros en sus tours.
Los visitantes suelen ver el Templo Songbul o el Fuerte Jongbang, cercanos a la ciudad.
Sariwŏn tiene varias estaciones de tren en distintas líneas del ferrocarril nacional, como la Línea P'yŏngbu, o la Hwanghae Ch'ŏngnyŏn.