Uno de sus edificios más emblemáticos es la Ermita Vieja, situada junto al cauce del río Segura, y que fue construida en el siglo XVI.
Así mismo, también se debe destacar el Palacete de la Seda, en la Vereda del Catalán.
Aún se conserva el antiguo cartel del colegio en la fachada de los actuales salones parroquiales.
Al final de la calle Polideportivo hay una pista de fútbol sala, otra pista para jugar al baloncesto, donde los jóvenes del pueblo van a visitarla y jugar un partido.
Aunque está cerrada permanentemente y no se puede visitar ni jugar.