Emerico de Hungría (santo)

Al igual que su padre y su preceptor, el obispo Gerardo, está considerado santo.

También contenía la sugerencia de recibir generosamente a los extranjeros en Hungría, para crear así mejores lazos con otras nacionalidades.

Según las crónicas húngaras, en 1031 Emerico murió a los 24 años de edad (tomando este dato como preciso, habría nacido efectivamente en 1007) en una cacería tras recibir heridas de un jabalí, dejando así a Hungría sin heredero.

Mientras rezaba, Dios cubrió con su gran poder y luminosidad toda la iglesia y le habló a san Emerico, indicándole que la ofrenda más grande que podía hacerle a Dios era la castidad.

De esta forma, el príncipe se ofreció a sí mismo y con su fe reforzada más aún por dicha aparición, prometió que no tomaría ninguna esposa jamás.

Tal acontecimiento sería guardado en secreto tanto por Emerico como por su siervo, y en el futuro, inclusive luego de desposar a una princesa griega bizantina, Emerico se mantuvo virgen hasta su muerte.

El obispo San Gerardo Sagredo y el pequeño príncipe Emerico, en Székesfehérvár, Hungría .
San Emérico de Hungría, estatua en Máriaremete , Hungría
Legendario Anjou húngaro (1320/1340): 1. San Emerico es sorprendido por su padre mientras reza en la madrugada. 2. San Emerico saluda con besos a los monjes. 3. San Emerico hace su voto de celibato. 4. Entierro de San Emerico.
Legendario Anjou húngaro (1320/1340): 1. San Eusebio ve en una visión a San Emerico siendo llevado a los cielos por ángeles. 2. El caballero germánico Conrado sumido en pecados visita al Papa, quien le pone esposas. 3. El pecador Conrado visita en procesión la tumba de San Esteban I de Hungría en Székesfehérvár , y es enviado a San Emerico. 4. Las esposas del pecador Conrado se caen de inmediato al llegar a la tumba de San Emerico.