Estimulada por Romeo, Tramontana se dispuso así a estudiar la gran historiografía italiana y europea sobre la Edad Media y descubrió, gracias a las páginas de Gina Fasoli, las Cronache medievali di Sicilia.
Note d’orientamento (1950), en fotocopias con numerosas glosas del autor, el cronista Michele da Piazza, que había narrado los acontecimientos sicilianos desde 1337 (muerte del rey Federico III de Aragón) hasta 1361.
I. Aspetti politici e militari de 1970 siguió Mezzogiorno normano e svevo (1972), le sirvió a Tramontana para dar un impulso a su investigación hasta casi vincularla con Michele da Piazza.
Abbigliamento, feste e spettacoli nel Medioevo (1993), Il Regno di Sicilia.
Uomo e natura dall'XI al XIII secolo (1999) y finalmente L'isola de Allāh.