Nacido en 1788[1] en la localidad soriana de Bretún, ingresó en el ejército en 1805 y fue hecho prisionero en la batalla de Tudela durante la Guerra de la Independencia Española y enviado a prisión en Francia.
Logró escapar y regresó a España, ocupando de nuevo distintos puestos en el ejército.
Finalizada la guerra, fue juzgado por el Tribunal de la Inquisición por masón, por lo que se vio obligado a exiliarse en Francia hasta que pudo regresar en 1820.
A finales del mismo mes desembarcó en Getares y puso cerco a Algeciras.
Después puso rumbo a Estepona, donde fue capturado y ejecutado.