En el año 2015 el Gobierno de Cantabria declaró el palu, el salto pasiego y sus modalidades como Bien de Interés Local Etnográfico Inmaterial.
Esta disciplina es similar en concepción a otros tipos de modalidades como el salto del pastor canario o el salto de canales que usaban en Flandes, y que aún hoy en día se realizan en Frisia.
Los antiguos pasiegos formaban un grupo de ganaderos que habitan en un territorio de relieve abrupto y quebrado que originó el uso del palancu o palu, pasiego, que les permitía evitar arroyos, muros, u hoyos en el suelo, durante sus movimientos en el monte.
También existe otra modalidad de la zona pero sin utilizar el "palu pasiego" que se denomina saltar en tres estrincones (modalidad similar al triple salto de atletismo), antiguamente a pies juntos.
En nuestros días el salto pasiego sobrevive como una modalidad de deporte rural que tiene lugar únicamente en diversas celebraciones.