[4] Se ha comprobado que los adultos reproductores regresan al mismo río en el que nacieron y pasaron sus primeros años de vida, donde se reproducen, y vuelven a descender por el río hasta el mar.
Un porcentaje de entre 3 % y 10 % sobrevive al desove para volver a reproducirse una segunda vez, en su mayoría hembras.
[2] Su gran olfato les permite encontrar el camino hasta el río donde nacieron, y se abren paso contra la corriente.
La hembra deposita los huevos en el lecho del río, en fondos arenosos, poco profundos, en aguas movidas y con oxígeno.
[4] Estos peces suelen tener como sus archi depredadores los osos pardos, los lobos, los zorros, las águilas, las gaviotas, las nutrias marinas, las focas, las orcas y los tiburones de Groenlandia.