Al inicio de las primeras protestas contra el gobierno provisorio de Abd Rabbuh Mansur al-Hadi, apoyó la revuelta chiita que se convirtió en un golpe de Estado entre 2014 a 2015.
[5][6] El 23 de abril del mismo año los houthi confirmaron su muerte.
Fue nombrado en septiembre de 2014 para servir como asesor político del presidente Abd Rabbuh Mansur al-Hadi.
[7] al-Sammad adoptó una postura conciliatoria durante y después del golpe de Estado consumado en 2015.
[8] En febrero de 2015, al-Sammad dijo que los houthis esperaban tener relaciones normales con los Estados Unidos y sus aliados, además expresó que los houthis estaban interesados en compartir el poder con otras facciones políticas del país, incluyendo potencialmente a los miembros de la Cámara de Representantes depuesta en una nueva 551 miembro del parlamento.