Sacristán (dulce)

Posteriormente, se agrega la harina gradualmente hasta obtener una masa que pueda ser trabajada con las manos, la cual debe dejar la mano engrasada pero no adherirse a ella.

Una vez que la masa está lista, se toman pequeñas porciones y se les da forma de cilindro con las manos.

Estas porciones se colocan sobre el azúcar y se aplastan hasta conseguir una forma elíptica con un grosor de unos pocos milímetros, quedando cubiertas de azúcar en ambas caras.

Finalmente, los Sacristanes se hornean durante unos minutos hasta que estén dorados y crujientes.

Una vez listos, se dejan enfriar antes de servir.