[1] Los Acuerdos de Camp David permitían a Israel mantener una pequeña presencia militar en el corredor Filadelfia, pero no así utilizar vehículos militares pesados.
[2] Frecuentemente se han descubierto bajo la misma túneles de contrabando construidos por los palestinos.
Cuando ambas partes estaban negociando en torno al acuerdo-marco propuesto por el presidente estadounidense Joe Biden a finales de mayo, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, introdujo cuatro nuevos requisitos para el acuerdo: que Israel pudiera volver a los combates cuando así lo estimase oportuno, que el número de rehenes vivos entregados por las milicias palestinas fuese lo mayor posible, y que las tropas israelíes debían mantener el control del corredor Filadelfia y del corredor Netzarim, que parte la Franja de Gaza en dos.
Por su parte, Hamás se remitió al acuerdo propuesto por Biden y se negó a la presencia permanente de tropas israelíes en territorio palestino después del alto el fuego.
Los mediadores internacionales, incluidos los israelíes, acusaron a Netanyahu de sabotear con estas exigencias las negociaciones para el fin del conflicto.