En 1944, un periódico canadiense describió a Shánina como «el terror invisible de Prusia Oriental».
[1] Se convirtió en la primera mujer en servicio del Tercer Frente Bielorruso en recibir la Orden de la Gloria.
[4] Roza era más alta que la media, con el pelo castaño claro y ojos azules.
[2] Los sábados, regresaba nuevamente a Bereznik para cuidar de su tía enferma Agnia Borisova.
Una amiga suya, Anna Samsonova recordaba que en ocasiones Shánina regresaba tarde a su dormitorio en la universidad cuando las puertas ya estaban cerradas.
Shánina se graduó de la universidad en el año académico 1941-1942,[10] cuando la Unión Soviética ya había sido invadida por la Alemania nazi.
Una versión reducida fue publicada en la revista Yunost en 1965, y el diario fue transferido al Museo Regional del Óblast de Arcángel.
Muchas cartas y datos sobre su registro de francotiradora se han publicado también.
La enfermera Yekaterina Radkina recordó a Roza arrepintiéndose de haber ayudado tan poco.
Sergéi nunca retornó de la guerra vivo, quedando Marat como el único sobreviviente.