Rosario Murillo

[4]​ En 1969 se integró en el movimiento guerrillero Frente Sandinista de Liberación Nacional.

Fue cofundadora en los años 1970 del grupo cultural Gradas de oposición a la dictadura somocista.

Se marchó al exilio en 1977 involucrada en el trabajo político y organizativo del FSLN.

Conoció a Daniel Ortega durante su exilio en Costa Rica y desde entonces es su pareja.

[14]​ Otra característica de su personalidad que impregna también su actividad política es su afición al esoterismo.

Su padre, Teódulo Murillo Molina (1915-1996) era un algodonero y dueño de ganado.

En 1969 Murillo se integró al movimiento guerrillero Frente Sandinista de Liberación Nacional.

En este trabajo me sentía realmente ejerciendo el oficio de escritor: recoger la vida nuestra, escribirla y devolverla esperanzada, ávida de frutas, a su verdadero dueño: el pueblo.

Rosario María Murillo Zambrana se convirtió en una guerrillera de las letras; denunciando a la dictadura, pidiendo apoyo hacia la lucha armada en Nicaragua desde el poder de la literatura, su militancia la llevó a la clandestinidad utilizando seudónimos como "Gabriela" "Carolina" o "Berenice Valdemar".

Vivió unos meses en Panamá y Venezuela, donde tejió redes de solidaridad con la lucha sandinista.

Durante la década sandinista publicó la antología poética "Amar es combatir" (1982), "En las espléndidas ciudades" (1985) y "Las esperanzas misteriosas" (1990).

[18]​ Según una encuesta que se hizo pública en noviembre de 2016 previa a las elecciones, Murillo era la persona que más agrado despertaba en la población de Nicaragua con un 79 % únicamente superada por su esposo con una aceptación del 81,1 %.

A pesar de que Rosario no quería casarse con él, su madre la obligó.

[18]​ A pesar de las desavenencias tuvo un segundo hijo del matrimonio, Rafael.

Finalmente se separó y empezó a trabajar en el diario La Prensa, allí conoció al que sería su segundo marido, el periodista de sucesos Anuar Hassan.

"Nunca antes nos hemos encontrado, pero hubo como una intuición… Nos identificamos inmediatamente, empezamos a conversar y de allí, seguimos desarrollando la relación”.

[35]​[36]​ El 22 de mayo de 1998 su hija primogénita Zoilamérica Narváez Murillo denunció haber sido abusada sexualmente desde los 11 años por su padrastro Ortega, Murillo se posicionó a favor de su marido y dijo sentirse "avergonzada" de su primogénita: “Les digo con toda franqueza, me ha avergonzado terriblemente que a una persona con un currículo intachable se le pretendiera destruir y (que) fuese mi propia hija la que por esa obsesión y ese enamoramiento enfermizo con el poder quisiera destruirla cuando no vio satisfecha su ambición”[18]​ El caso no trascendió por la vía legal debido a que Ortega gozaba de inmunidad como expresidente (1980-1990) y porque la causa había prescrito, según la justicia nicaragüense.

[39]​[40]​ Zoilamérica en 2016 denuncia la impunidad en Nicaragua y critica la concentración de poder en el país.

Saludo entre el expresidente salvadoreño Salvador Sánchez Cerén y el presidente nicaragüense Daniel Ortega. En el fondo se encuentran Rosario Murillo, primera dama de Nicaragua, y el presidente de Cuba Miguel Díaz-Canel.