Se casaron en Palathas y se establecieron en Solace (tuvieron que abandonar Solamnia ya que no es propio de un caballero escaparse con una muchacha) donde Rosamun tuvo su primera hija, Kitiara.
Como cada vez que regresaba a Solace Rosamun le acosaba con acusaciones (quizá no del todo falsas) las visitas de Gregor a Solace se fueron espaciando hasta que un día no volvió.
Vive un parto muy difícil, tanto que, después de nacer Caramon, cuando aparece el segundo niño y la comadrona sugiere que lo deje morir, Rosamun acepta, eso sí con lágrimas en los ojos.
Rosamun cada vez vive trances más profundos y Gilon, al ser leñador, pasa largos periodos alejado de su hogar.
Raistlin y ella se comprenden mutuamente mejor que con el resto de la familia.
Un día, tras un trágico accidente, los leñadores traen del bosque el cuerpo casi sin vida de Gilon.