Rosa Estruch Espinós

Años después regresaron al pueblo, pero la situación económica les hizo emigrar de nuevo, en esta ocasión a Francia.

Con la incorporación a filas del alcalde comunista Andrés Tarazona, Rosa Estruch fue nombrada alcaldesa en pleno contexto bélico.

Pese a su invalidez, Rosa Estruch siguió con la militancia en la clandestinidad, colaborando en la reorganización del PCE en la Comunidad Valenciana.

Ante su insistencia para que compareciese ante un tribunal, fue trasladada en camilla a la sala del juicio.

Tras el informe del médico forense sobre su situación física, Rosa no volvió a ser molestada por las autoridades franquistas.

[2]​[3]​[4]​ Rosa Estruch fue un referente para las camaradas que habían militado con ella en la República y la guerra.