Originalmente desarrollado para el Lockheed L-1011 (TriStar), entró en servicio en 1972 y fue el único motor en propulsar ese modelo de avión.
Los costes de desarrollo llevaron a la bancarrota a Rolls Royce Limited y fue nacionalizada por el gobierno británico.
Posteriormente fue producido en versiones derivativas para variantes de los aviones Boeing 747, 757 y 767, así como para el avión comercial ruso Tupolev Tu-204.
También se creó una versión para generación de energía en el suelo.
El RB211 fue sustituido en los años 1990 por la familia de motores Rolls-Royce Trent.