Jugó la mayor parte de su carrera en Independiente Rivadavia club del cual es el máximo goleador histórico con 120 goles.
López debutó en la primera de los Azules en el '56 sin haber pasado nunca por las divisiones inferiores.
En 1960 contrataron al rosarino Carlos Moyano, que venía de Club Atlético Boca Juniors (Bermejo) campeón del '57, pero terminó jugando López, que fue el goleador del equipo, e Independiente Rivadavia fue campeón después de 15 años sin conseguir ese título.
En 1969 fue dejado en libertad de acción y se incorporó al Deportivo Guaymallén, tentado por otro delantero por entonces director técnico, Hardán Curi.
Terminó jugando en Club Atlético Villa Atuel, adonde revalidó con mucho éxito, sus cualidades de rompe redes.