Para este disco el cantante agrega elementos del dance-rock y el pop rock, subgéneros musicales que ya había incursionado en el supergrupo The Power Station.
Dos de sus excompañeros en la mencionada banda, Andy Taylor y Tony Thompson, participaron como artistas invitados en algunas canciones.
Asimismo, Bernard Edwards, quien produjo el álbum The Power Station, fungió como productor y bajista.
Este último logró un considerable éxito en algunas listas musicales, por ejemplo llegó hasta el número uno de los conteos estadounidenses Billboard Hot 100 y Mainstream Rock Tracks.
[7][8] En el Reino Unido llegó hasta el quinto lugar del UK Singles Chart, siendo su sencillo mejor ubicado en la mencionada lista.