Durante la mayor parte del año suele gozar de un carácter cosmopolita y festivo.También son reseñables las fechas de verano y Semana Santa debido a la transformación y animación propia de sus calles.Aparte, y también durante la época estival, la población llega a triplicarse gracias al turismo.Aunque actualmente no queda ningún resto de la razón de ser del topónimo, se piensa que en este lugar se embalsaban las aguas de los temporales.Se formaban pequeños estanques que se calentaban y producían oix (asco, náuseas en valenciano)[1] Debido a la extensión del barrio, éste se suele dividir de manera informal en varias zonas: