Ricardo Cavallo

El 26 de octubre de 2011 fue condenado a cadena perpetua e inhabilitación absoluta y perpetua por la justicia argentina, y en 2014 dicha condena quedó confirmada.[1]​[2]​[3]​[4]​ Mientras vivía en México, trabajaba como director del Registro Nacional de Vehículos (RENAVE), Ricardo Cavallo fue acusado en España en el año 2000 por el juez Baltasar Garzón, quien pidió su extradición bajo el principio de la jurisdicción universal.[cita requerida] Mientras Ricardo Cavallo esperaba juicio en España, en Argentina se anularon por completo la Ley de Punto Final y la Ley de Obediencia Debida, que impedían el inicio de juicios por crímenes cometidos durante el proceso.Dado que Cavallo podía entonces ser juzgado en la Argentina, la Audiencia Nacional afirmó no tener jurisdicción y decidió que Cavallo fuera juzgado en su propio país.En julio de 2007, sin embargo, el Alto Tribunal español decidió nuevamente que fuera juzgado en Madrid, ya que el caso estaba allí más avanzado.