Ricardo contribuyó a conseguir el ascenso con cuarenta y seis goles, siendo el máximo goleador de la categoría.
Ello le permitió regresar a Valencia en la siguiente campaña, donde siguió con su racha anotadora.
En total, sumó diecinueve dianas a lo largo del campeonato y compartió, con Alfredo Di Stéfano y Manuel Badenes, el Trofeo Pichichi como máximo realizador de la Liga.
A pesar de su gran campaña, las siguientes temporadas tuvo un papel secundario en el equipo.
En dos años sólo fue alineado en doce partidos de Liga en los que marcó cinco goles, por lo que en 1960 decidió abandonar el club para recalar en el Real Murcia C. F. de Segunda División.