La experiencia en el club catalán no fue todo lo satisfactoria que el preveía ya que, a pesar de ganar dos títulos de Liga —1947-48 y 1948-49—, en sendas temporadas su participación fue testimonial, disputando en la última tan sólo un partido.
Gracias a ello, el Valencia consiguió un subcampeonato de Liga y conquistó la Copa del Generalísimo en 1954.
En sus dos temporadas en el equipo castellano volvió a mejorar sus números logrando dieciséis y diecinueve goles, respectivamente.
Esta última cifra le permitió obtener el Trofeo Pichichi, otorgado al máximo goleador de la Liga española, compartido con Alfredo Di Stéfano del Real Madrid C. F. y Ricardo Alós del Valencia.
Disputó su última campaña como profesional en el Real Sporting de Gijón, donde logró cuatro tantos en veintiún partidos.