Reverón (película)

La película es un ensayo sobre la locura y la creatividad a través de la vida y obra del pintor venezolano Armando Reverón, uno de los mejores artistas plásticos latinoamericanos del siglo XX.

Armando Reverón es un pintor que vive retirado junto a su compañera, Juanita, en la costa venezolana.

Reverón tiene mucho tiempo sin pintar, pero finalmente retoma el trazo y elabora el que será su último autorretrato.

Junto al director Alain Resnais realizó una película sobre el pintor Vincent Van Gogh, la primera en su género.

En Caracas descubrió fascinado la obra casi desconocida de Reverón y se planteó hacer un film que reivindicara al artista venezolano.

Contactó a Resnais pero éste no podía venir al país por compromisos adquiridos previamente.

Benacerraf se acercó cinematográficamente al pintor a partir de un guion elaborado en base a tres líneas que se desarrollan paralelamente durante un día: la luz, la vida de Reverón y su obra.

En la película, al traspasar la muralla del Castillete, se hace un recorrido circular en su interior hasta que se entra en el taller donde encontramos a Reverón delante del espejo, frente a la tela.

Posteriormente, Reverón  fue incluida en la sección de películas sobre Arte en la Muestra Testimonios del Cine.

Un momento inolvidable con el que se iniciaría una creativa relación de amistad entre el genio malagueño y la cineasta venezolana.