La alineación de pilotos fue Jarno Trulli y Fernando Alonso, quien sustituyó a Jenson Button que partió a BAR.
Más tarde, el equipo ganó el Gran Premio de Hungría de 2003, la primera vez que Renault ganaba un Gran Premio desde el Gran Premio de Austria de 1983.
Renault fue innovadora en este período producir diseños que no son estándar, como el motor del 111° 10 cilindros para RS23 de 2003, que fue diseñado de manera efectiva a reducir el centro de gravedad del motor y así mejorar el manejo del coche.
Esto, a la larga, resultó demasiado pesado y poco fiable, por lo que Renault volvió a la ruta de desarrollo más convencional.
Finalmente, el equipo terminó cuarto en el Campeonato de Constructores con 88 puntos.