René Mayer

Se dedicó a los negocios en el período de entreguerras, importando carbón alemán.

Junto con el profesor David Olmer, abogó por la dimisión colectiva, pero se impuso la cooperación, sostenida por Raymond-Raoul Lambert.

Se unió al general Henri Giraud en Argel en 1943, que le confía la secretaría de Comunicaciones del mando supremo francés civil y militar.

[1]​ Después de la Liberación, se postuló a la asamblea constituyente en la Gironda, pero no fue elegido.

Sí lo fue luego: fue diputado radical por Constantina (Argelia francesa) en 1946 y conservó el escaño hasta 1955.

Una amnistía que anule las condenas de los reclutados a la fuerza es ahora la única solución».

Su gobierno cayó al solicitar poderes especiales en materia financiera (setenta y un gaullistas votaron contra el gabinete, pese a estar presidido por un europeo convencido partidario de la CED).

Su ideario político lo resumió en una frase sucinta: «La vocación de Francia es triple: europea, atlántica y mundial».

Felicitó al primer ministro Pierre Mendès France y su ministro François Mitterrand por su firme respuesta a la agitación en Argelia en la sesión parlamentaria del 9 de noviembre de 1954.

Tumba de René Mayer