Originalmente, la analogía representaba la amenaza de guerra nuclear global, pero desde hace algún tiempo incluye cambios climáticos y todo nuevo desarrollo en las ciencias y nanotecnología que pudiera infligir algún daño irreparable.
Desde su concepción, el reloj ha aparecido en todas las portadas del Bulletin of the Atomic Scientists.
En el último medio siglo, el Reloj del Apocalipsis ha sido el símbolo más representativo de peligro nuclear.
El diseño original ha ido transformándose a lo largo de los años y fue completamente rediseñado en 1989 para hacer hincapié en el carácter global del Bulletin.
Desde la Guerra Fría, muchas personas creen que el reloj ha perdido su significado apocalíptico.
En 2020 se movieron las manecillas de este reloj a cien segundos para la medianoche.
Esto se debe a varias amenazas, entre las cuales las principales son la guerra entre Rusia y Ucrania, el cambio climático, la posibilidad de una guerra nuclear, la posibilidad de nuevas enfermedades, el colapso económico y social.