La región de Tombuctú (oficialmente, y en francés, région de Tombouctou) es la región más septentrional y más grande de Malí, comprendiendo en gran parte la zona sudoeste del desierto del Sahara.
La ciudad se ganó la fama mundial en 1390, cuando su gobernante, Mansa Musa, peregrinó a La Meca, deteniendo su séquito en Egipto y gastando tanto oro que devaluó la moneda egipcia.
Desde finales del siglo XIX y hasta 1960 estuvo bajo control colonial francés, quedando encuadrada en la administración del África Occidental Francesa.
[3] Meses después las fuerzas malienses recuperaron el control de la zona, revirtiendo la independencia tuareg.
Es una región prácticamente desértica, a excepción de la zona del río Níger que transcurre por el sur de la región.