Reconstruccionismo cristiano

El reconstruccionismo cristiano es un movimiento teonómico reformado fundamentalista[1]​ que se desarrolló bajo las ideas de Rousas Rushdoony, Greg Bahnsen y Gary North;[2]​ ha tenido una influencia importante en la derecha cristiana de los Estados Unidos.

[13]​[14]​ Por ejemplo, el cumplimiento de las sanciones morales bajo la teonomía se lleva a cabo por el gobierno de la familia y la iglesia, y las sanciones por delitos morales están fuera de la autoridad del gobierno civil (que se limita a asuntos penales, tribunales y defensa nacional).

Bajo tal sistema, la lista de crímenes civiles que conllevaban una sentencia de muerte incluiría asesinato, homosexualidad, adulterio, incesto, mentir sobre la virginidad, bestialidad, brujería, idolatría o apostasía, blasfemia pública, falsas profecías, secuestros, violaciones y dar falso testimonio en un caso capital.

[20]​ Kayser señala que la Biblia aboga por la justicia, y que los castigos bíblicos prescritos por delitos son el máximo permitido para mantener la justicia y no la única opción disponible, porque los castigos menores también están autorizados.

[28]​ Esta es la tendencia más amplia a la que algunos críticos se refieren, en general, como dominionismo.

[29]​[30]​[31]​[32]​ En Mateo 28:18, Jesús dice: "Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra".

Desde ese punto de vista, algunos teólogos interpretan la Gran Comisión como un comando para ejercer esa autoridad en su nombre, y someten todas las cosas (incluidas las sociedades y las culturas) bajo sus órdenes.

Rousas Rushdoony, por ejemplo, interpretó la Gran Comisión como una republicación del "mandato de creación",[33]​ refiriéndose a Génesis 1:28.

[12]​ Algunos sociólogos y críticos se refieren al reconstruccionismo como un tipo de dominionismo.

[47]​ Los autores Sara Diamond y Fred Clarkson sugieren que Schaeffer compartió con el reconstruccionismo la tendencia al dominionismo.

Algunos movimientos culturales y políticos cristianos separados se oponen a ser descritos con la etiqueta de dominionismo, porque en su opinión la palabra implica apego al reconstruccionismo.