Rambla Nova

Acoge terrazas, restaurantes, tiendas elegantes, así como la sede de distintas corporaciones tanto privadas como públicas.

En su extremo Este, se encuentra el Balcón del Mediterráneo, mirador prominente desde el que se domina una amplia panorámica sobre la costa y el mar.

Su construcción exigió costosas labores de rebaje y relleno.

Sucesivas ampliaciones han ido alargando el eje viario rectilíneo hasta alcanzar los 1800 m aproximadamente, con una anchura de 50 m, aunque esos tramos ya no mantienen la denominación original.

Técnicamente no es una "rambla" (torrente), pero adoptó esa denominación por mimetismo con las Ramblas de Barcelona, en cuya estructura se basó el diseño (paseo peatonal central arbolado, vías para circulación rodada en los laterales).

Zona central de la Rambla Nova.