Gabilondo, dio sus primeras patadas al balón en los campos de Éibar.
El Athletic, que había quedado subcampeón de su categoría, pudo así ascender directamente.
Posteriormente se apartó del fútbol profesional y se dedicó al ejercicio de la Medicina, pero nunca abandonó el mundo del balón.
Se sentía particularmente orgulloso de haber descubierto a Collar y mantenía una estrecha relación con su paisano Gárate.
Fue, igualmente, colaborador del programa radiofónico Carrusel Deportivo.