En su camino de 60 km, recibe aportes de numerosos esteros tributarios, entre los cuales cabe mencionar el Vamuco, el Reloca y el Santa Rosa por su ribera norte o derecha, y los esteros Giampuli¡ Tauco y Leuque por la izquierda.
Al igual que la subcuenca baja del Ñuble, la subcuenca del Itata, que incluye a la cuenca del río Lonquén, muestra un marcado régimen pluvial, con sus crecidas en invierno y menores caudales en verano.
En años secos los mayores caudales se presentan entre julio y septiembre, mientras que los menores ocurren entre diciembre y mayo.
En su sección le denominan riachuelo del Guindo por un fundo de este título, que por aquí baña, y en su parte inferior suelen darle el nombre de Santa Rosa; recibiendo también por esta parte unos arroyos que aumentan su caudal, que no es crecido, sin embargo, sino en invierno.
Sus riberas son generalmente quebradas, pero adaptables al cultivo.