En la mayoría de los casos tiene su origen en el segundo arco branquial y por esa razón aparece en la cara lateral del cuello.
El diagnóstico se realizará mediante palpación del quiste y exámenes complementarios (TC o PAAF).
[3] Los quistes branquiales son estructuras benignas y solo en raras ocasiones se asocian a alguna forma de cáncer.
Es característico la presencia de tejido linfoide con centros germinales prominentes en las paredes fibrosas del quiste.
En el caso de que el paciente haya sufrido procesos infecciosos previos la tumoración será más dura debido a la fibrosis.