Quinta paralela

Al igual que las cuartas paralelas posee una sonoridad muy característica.Con esta regla, se pretende promover una primera voz independiente y una buena composición polifónica.[1]​ Su uso estuvo restringido desde el período barroco hasta el período romántico, o se utilizaba muy acotadamente cuando no había alternativa mejor, utilizándose normalmente procedimientos que suavizaban y ocultaban la quinta paralela.Los distintos movimientos musicales posteriores al romanticismo, como el impresionismo musical, los distintos nacionalismos, etc., han utilizado las quintas paralelas como un recurso más, aprovechándose de la fuerte impresión que este tipo de sonoridades producen en el oyente.Otro tanto han realizado los compositores anteriores al barroco como Palestrina, etc., aunque por motivos diferentes, ya que para las épocas en que vivieron estos músicos, no estaban asentadas aún las bases de la armonía clásica.
Quinta paralela entre las voces de bajo y tenor .