Permite el paso de protones a su través, utilizando esa energía cinética para fosforilar ADP y así crear ATP.
La generación de ATP por quimiosmosis ocurre en cloroplastos y mitocondrias, como también en algunas bacterias.
Las moléculas como la glucosa, son metabolizadas para producir acetil-CoA como un intermediario rico en energía.
Los protones se devuelven a través de la membrana interna, mediante la enzima ATP-sintasa.
Los electrones y protones en la última bomba proteica de la cadena transportadora son llevados al oxígeno (O2) para formar agua (H2O).
Mover los protones a las partes externas crea una concentraciones levemente alta de partículas cargadas positivamente, dando por resultado un lado más positivo y un lado más negativo (El gradiente eléctrico generado es de aproximadamente -200 mV (matriz negativa) ) Esta diferencia de carga da como resultado un gradiente electroquímico.
El gradiente de pH corresponde a la diferencia en la concentración del ion H+.
Juntos, el gradiente electroquímico de protones corresponde tanto a la concentración como a la diferencia de carga que se pueda generar, se denomina Fuerza Protón-Motriz (FPM).
La fosforilación quimiosmótica es la tercera y final vía biológica responsable por la producción de ATP mediante fosfato inorgánico y ADP a través de la fosforilación oxidativa.
La clorofila pierde un par de electrones al ser excitada o energizada por la luz.