Quimón de Argos (en griego antiguo: Χείμων ο Αργείος),[1] fue un vencedor olímpico del siglo V a. C. originario de Argos.
[2][3][4] Dos estatuas, una en Olimpia y otra en Argos, le honraban.
Pausanias las consideraba las mejores estatuas hechas por Naucides, también de Argos.
La estatua de Argos fue llevada a Roma por Nerón; Vespasiano la colocó entonces en el templo de la Paz.
[5][3][6] Aristeo, hijo de Quimón, ganó el dólico, probablemente en los Juegos Olímpicos de 420 a. C.[5][7] Es probable que fuera Naucides quien encargara las estatuas en honor a su padre, así como la suya propia, colocada en Olimpia junto a la de su padre.