La Quema del raspajo es una antigua tradición de la localidad murciana de Las Torres de Cotillas, en España, que actualmente se alegoriza con la quema de un espantapájaros gigante, como colofón a las fiestas patronales en honor a Nuestra Señora de la Salceda y que procede de una antigua tradición que daba nombre a las fiestas de la localidad desde finales del siglo XVIII.
El raspajo es la raspa que queda del racimo después de quitarle las uvas.
En este pueblo desde el siglo XV y hasta inicios del siglo XX era muy abundante el cultivo de la uva.
La fiesta tradicional tal y como lo menciona la prensa de 1911[cita requerida] consistía: Actualmente nada queda de uva en la localidad y la Quema del raspajo quiere rememorar esa vieja tradición y pasado huertano, vendimiador y agrícola de la localidad.
Es sin duda un evento variopinto y curioso de cuantos ocurren en España.