Pura Vila y Linares (Sanlúcar de Barrameda, 1870 - ibídem, 1962) filántropa católica española nombrada hija predilecta de su ciudad natal, como así lo conmemora una lápida, colocada en 1961 en su casa de la calle Bolsa n.º 6.
Hija del matrimonio formado por Ana Linares Paz y Manuel Mª Vila Vargas (que fue varias veces alcalde de Sanlúcar de Barrameda), ambos católicos con gran formación religiosa, además de piadosos y caritativos.
De su madre heredó materialmente un gran capital en campos y bodegas; y espiritualmente el sentido cristiano de la vida, tanto mediante una gran formación como en actos piadosos.
Forjó un fuerte carácter que junto a sus hábitos religiosos le llevó a sobreponerse en su viudez tras un breve matrimonio, la muerte de un hijo varón, la enajenación de su marido y la de su padre casi simultáneas.
Tras su viudedad se dedicó a la educación de sus hijas y al apostolado, al tiempo de llevar una vida activa.