Se sabe que el nombre de la puerta proviene del patio al que da acceso, el patio de la Montería.
La más aceptada es que el patio estaba adornado con escenas de caza.
La denominación actual parece haberse originado en el siglo XIX dentro de círculos literarios románticos.
Estas aperturas fueron realizadas con posterioridad a la construcción del Palacio del rey don Pedro, al abrirse a eje con el palacio.
Traspasados los arcos se accede al patio de la Montería.