Puente del Cristo de la Expiración (Sevilla)

[1]​ Los pasos peatonales a lo largo del puente están cubiertos con lonas blancas que cuelgan de mástiles y alivian el calor de los viandantes.

Hasta 1991, el paso del río Guadalquivir por la ciudad de Sevilla se encontraba cortado en una parte del cauce.

En ese año se decidió recuperar el antiguo recorrido y se eliminó el denominado tapón de Chapina, que impedía el paso del agua, lo que supuso la recuperación de más de cuatro kilómetros de río.

El puente se construyó sobre el cauce seco cuando todavía no se había retirado el tapón de tierra.

[3]​ De forma popular también se conoció el puente, en su momento, como “puente de los Leperos” por el hecho expuesto de que primero se construyó el puente y después se hizo el cauce para que pasara el río y también coincidió su construcción con una época en que estaban de moda los chistes de Lepe.

Vista del puente del Cristo de la Expiración, durante su construcción en 1991, en el que se observa el entonces cauce desecado de esta zona del río Guadalquivir.