Un semáforo es un mástil dotado de una paleta o brazo articulado que puede adoptar varias indicaciones.
El brazo mecánico sustituyó al brazo del hombre, que fue el primer sistema utilizado en los albores del ferrocarril para indicar a los maquinistas que la línea estaba ocupada o libre, tarea encomendada a la denominada entonces policía de ferrocarriles.
Además del sistema alámbrico, se utilizó también la transmisión rígida de barras, la hidráulica y la eléctrica.
La compañía MZA fue la que más utilizó esta tipología de señales, que podía ofrecer tres posiciones: anuncio de parada (brazo inclinado 45°), alto (posición horizontal) y vía libre (vertical).
Fue construido en 1929 por la empresa norteamericana General Railway Signal-GRS para la compañía MZA e instalado en la bifurcación Don Carlos, en la línea Barcelona-Mataró.