Puente acuífero

En general, solo permiten el tráfico de pequeñas embarcaciones y barcazas.

Comúnmente se utilizan esclusas para elevar y descender las naves.

Los acueductos se conocen desde la antigüedad, casi desde el mismo momento en que nacieron las ciudades.

Los primeros puentes-canal se construyeron en Francia en el siglo XVII durante la excavación del canal du Midi: el puente canal del Répudre, que aún se conserva, está clasificado como monumento históricos.

Tiene 918 m de largo y destronó en 2003 al puente canal de Briare en Francia que mantuvo este récord desde 1896 con 662 m.[2]​ Otros puentes-canal importantes son:

Puente de agua de Magdeburgo, Alemania, terminado en 2003, es el más largo de Europa.