La prostitución en Hungría ha sido legalizada y regulada (sin incluir burdeles ni proxenetismo)[1] por el gobierno desde 1999.
[2][3] Según la ley, las prostitutas son básicamente profesionales que se involucran en actividades sexuales a cambio de dinero.
El gobierno permite esta actividad siempre que paguen impuestos y mantengan documentos legales.
[7] Estas zonas rojas legalmente deben estar, en todo caso, alejadas de escuelas o iglesias.
[1] Las prostitutas deben tener al menos 18 años,[1] poseer un "permiso de empresario" y pagar impuestos.