En la mitología griega Proioxis (en griego Προΐωξις, Proíōxis) era la personificación de la «Persecución».
Como abstracción personificada estaba labrada en el escudo de Heracles:«Allí estaban labradas la Persecución (Προΐωξις) y el Contraataque (Παλίωξις, Palíōxis).
Allí también ardían el Tumulto (Ὅμαδος, Hómados), la Huida (Φόβος, Phóbos) y la Masacre (Ἀνδροκτασία, Androktasía).
Allí se arrojaban Eris y el Desorden (Κυδοιμός, Kydoimós); y allí la funesta Ker, con un guerrero vivo, recién herido, y otro ileso, a otro le arrastraba a duras penas de ambos pies; un manto tenía en los hombros, enrojecido con sangre humana; miraba de modo horrible y rugía con grandes alaridos».
[1]Pudiera ser parte de los integrantes de las Batallas (Μάχαi, Máchai) personificadas, démones del campo de batalla, aunque esta asignación no se encuentra atestiguada en ninguna fuente.