El sistema contaría inicialmente con un total de 480 misiles Spartan y 192 Sprint.
Sentinel fue una respuesta al rápido aumento de los costes del programa anterior Nike-X.
McNamara habló en público varias veces para explicar por qué no valía la pena implementar Nike-X, pero la presión continuó aumentando y el Congreso votó a favor de proporcionar fondos para el despliegue por encima de sus deseos.
Esto alivió la presión para implementar un sistema más grande y, al mismo tiempo, mantuvo los costos bajo control.
Cuando Richard Nixon asumió el cargo en enero de 1969, la opinión pública se había convencido fuertemente contra los ABM.