1939 El investigador alemán Hans Gaffron descubrió durante su trabajo en la Universidad de Chicago, que las algas pueden cambiar entre producir oxígeno e hidrógeno.
El reactor será usado para probar la factibilidad económica del sistema en los próximos cinco años.
Las algas crecen en un circuito cerrado y producen más hidrógeno que en su estado natural.
Mientras que las algas crecen bien en una zona abierta, el sistema Vertigro usa un invernadero lleno de bolsas de plástico altas y transparentes, suspendidas una junto a otra en filas para cultivar algas.
Tomaría una granja de algas del tamaño de Texas para producir suficiente hidrógeno para cubrir las necesidades energéticas del mundo entero.
1 kg es aproximadamente la energía equivalente a un galón (3.7854 L) de gasolina.