Primera Filípica

En 352 a. C., Demóstenes presentó a Filipo como el peor enemigo de su ciudad,[1]​ y, un año más tarde, hizo una dura crítica sobre aquellos que minusvaloraban a Filipo, y les advertía de que era tan peligroso como el propio Rey de Persia.

[2]​ En 352 a. C., las tropas atenienses lograron oponer una exitosa resistencia a las tropas de Filipo en las Termópilas,[3]​ pero ese mismo año el ejército macedonio llevó a cabo una campaña militar en Tracia en la que obtuvo una gran victoria sobre los focianos.

El tema que trata la Primera Filípica es la necesidad de estar preparados.

[4]​ Eubulo aprobó una ley que hacía muy difícil desviar fondos públicos, lo cual incluía el desvío del fondo "Theorika" para pagar operaciones militares menores.

A pesar del estilo apasionado del orador, parece ser que la ekklesía no compartía su punto de vista e insistió en la forma de proceder habitual, lo cual obligó a Demóstenes a repetir la misma argumentación en las Olínticas.