Presunto homicida (película de 2000)

Callum Crane (Bill Pullman) es un reconocido abogado a punto de convertirse en juez cuando, debido a deseos carnales motivados por el alcohol, hace algo que tendrá consecuencias devastadoras: ataca sexualmente a su preciosa y flamante ayudante Sophie (Gabrielle Anwar).

Ella le amenaza con contarlo todo, y destruir así su carrera y la frágil relación que tiene con su esposa Natalie.

Mientras tanto, Nathan, un joven delincuente de poca monta, descubre que Crane es su verdadero padre y decide buscarle.

Por un extraño giro del destino, Nathan se hace amigo de la compañera de piso de Sophie, Tanya, cuando se la encuentra cerca del despacho de Crane.